El destino del Tottenham parecía condenado al gris después de cerrar la peor temporada de su historia reciente: un 17º lugar que ni siquiera la Europa League pudo maquillar, y el despido de Ange Postecoglou lo confirmó. Sin embargo, el fútbol, con su capacidad de reinventarse, abrió un nuevo capítulo.
En un Tottenham Hotspur Stadium lleno hasta el último asiento, Thomas Frank, el danés que transformó a Brentford en un equipo competitivo de Premier League, debutó como nuevo estratega de los Spurs. Con un gesto sencillo, levantó la mano a las cuatro tribunas, consciente de la responsabilidad de resucitar a un club herido.
El guion de esta primera película en Londres lo escribió Richarlison. El brasileño, cuestionado la temporada pasada por sus cinco goles, se transformó en héroe: primero con un remate letal tras un centro de Mohammed Kudus al minuto 10, y después con una obra de arte al 60’, una chilena que hizo estallar al estadio como si fuera una final de Champions.
RICHARLISON, THAT IS STUNNING. 😱 pic.twitter.com/LMBaBAKCyg
— NBC Sports Soccer (@NBCSportsSoccer) August 16, 2025
Brennan Johnson completó el 3-0 ante un Burnley que había presumido de récord defensivo en Championship, pero que descubrió que en Premier la historia es distinta.
Los aplausos también tuvieron otro destinatario: Mathys Tel, ovacionado tras el episodio de racismo sufrido días antes en la Supercopa de la UEFA contra el PSG, partido que Tottenham perdió en penales pese a ir 2-0 arriba.
La prensa inglesa, desde The Guardian hasta BBC Sport, coincidió: Frank no solo dio un golpe táctico, sino que devolvió esperanza a una afición cansada de decepciones.
Daniel Levy, presidente del club, confió en su pragmatismo para devolver a los Spurs a la élite. Este primer acto, respaldado por el talento de Richarlison, parece ser apenas la introducción de una película que promete capítulos intensos.
