Wroclaw, Polonia. La ciudad despierta entre banderas verdiblancas y cantos que cruzan el frío del este europeo. Real Betis está a un paso de una hazaña histórica: disputar por primera vez un título europeo. No es solo una final. Es una página por escribirse.
En la víspera del duelo frente al Chelsea por la UEGA Conference League, tres hombres dieron la cara por el equipo: el ingeniero Manuel Pellegrini, el renacido Isco Alarcón… y el centinela del vestuario, Marc Bartra.
«Esto no es solo una final. Es escribir la historia de un club como el nuestro», dijo Bartra, con esa mezcla de serenidad y fuego que solo los que han vivido noches grandes pueden transmitir. Campeón de Champions con el Barça, el central catalán ha sentido lo que muchos sueñan, pero ahora busca algo diferente: hacerlo con Betis, desde el alma, desde el barro, desde la emoción pura.
Porque esto no va solo de táctica o estrellas. Va de identidad.
El Betis ha crecido ronda a ronda en esta Conference League. Bajo el mando de Pellegrini, el equipo ha evolucionado, ha aprendido a sufrir y a ganar. Y llega a Wroclaw con miles de aficionados que viajaron con o sin entrada, pero con el corazón lleno. «Les pedimos que dejen el alma en la grada. Nosotros a dejaremos en el campo», dijo Bartra.
Enfrente, un gigante: el Chelsea. Pero Betis tiene algo que el dinero no compra: beticismo. Una forma de sentir que, según Bartra, convierte al equipo en familia. Una que no se rinde.
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— Real Betis Balompié 🌴💚 (@RealBetis) May 28, 2025
Hoy es diferente… ¡hoy es día de #EuroBetis!#DíaDeBetis pic.twitter.com/oiff7NYwXw
Bartra recordó a los suyos: los que estuvieron en las buenas y en las malas. Su familia, compañeros, utileros. Y deslizó una promesa silenciosa: ha soñado con marcar, aunque no lo diga abiertamente. Tal vez, esta noche, el destino le tenga guardado un último golpe de cabeza… al corazón de Europa.
