Mbappé esquiva castigo severo y jugará la final de Copa ante el Barça

Mbappé esquiva castigo severo y jugará la final de Copa ante el Barça

Cuando el silencio cayó en Mendizorroza, el miedo se apoderó del madridismo.

Una entrada fuera de lugar, el silbato que rompió el aire y una roja directa para Kylian Mbappé. ¿Sería su última aparición ante de la final? ¿Estaba el Clásico copero en peligro?

Apenas habían pasado minutos desde el incidente cuando los aficionados del Real Madrid ya especulaban con lo peor. La acción fue dura, sin lugar a dudas. Antoni Blanco terminó en el suelo tras una entrada que desató la polémica. La expulsión era inapelable. Pero la verdadera incógnita se escondía en los despachos del Comité de Competición.

El reglamento es claro: si una conducta es considerada especialmente violenta, la sanción puede escalar hasta los 4 partidos o más, lo que automáticamente obligaría a cumplir también partidos fuera de la Liga, como la Copa del Rey.

El madridismo temía una sanción ejemplar. Pero todo cambió con el acta arbitral.

Soto Grado, árbitro del encuentro, describió la acción como una disputa del balón. Esa frase lo cambió todo. La redacción del acta no hablaba de agresión ni de intención dolosa, sino de una entrada pasada de revoluciones dentro del contexto del juego.

Eso le dio al Comité la base para aplicar el artículo 54 del Código Disciplinario, que penaliza con un solo partido las acciones violentas «con ocasión del juego». La sanción fue clara: un partido y multa accesoria. Mbappé descansará ante el Athletic Club… pero jugará la final ante el Barcelona.

El propio Mbappé, consciente del revuelo, se disculpó con sus compañeros y con el propio Blanco, cerrando el capítulo con autocrítica y responsabilidad. Ya ha pasado página. Su mirada está puesta en Londres, en esa cita decisiva contra el Arsenal por la Champions.

Y luego, el Clásico copero.
El Madrid respira. El espectáculo está asegurado.