En una noche que prometía luces para Kylian Mbappé, quien volvía a los terrenos con los focos sobre sus pies, fue otro nombre el que quedó escrito en la historia: Gonzalo. El delantero de 21 años no necesitó más que una sola oportunidad. Un testarazo quirúrgico, justo cuando el partido parecía estancado, le dio al Real Madrid el pase a cuartos de final del Mundial de Clubes tras vencer a una Juventus aferrada a su resitencia.
Mientras el mundo centraba su atención en los galácticos de siempre —Vinicius, Modric, Mbappé, Bellingham—, Gonzalo tejía, sin hacer ruido, una narrativa que huele a leyenda. Ha marcado en todos los partidos importantes de esta nueva era blanca. Lo hizo ante Al-Hilal, Pachuca, Salzburgo y ahora frente a la Juve. Y no solo eso: lo ha hecho con frialdad quirúrgica, como si llevara años en la élite.
Esta vez, fue también el día de la reivindicación de Fede Valverde, pulmón inagotable del nuevo Madrid. El uruguayo mostró liderazgo ofensivo, pegada y visión en un partido que parecía sacado de una pinballera táctica. Cuatro remates suyos generaron el caos en el área italiana. La Juventus, con un Di Gregorio monumental en portería, resistió mientras puto. Pero no fue suficiente.
El técnico Xabi Alonso, sin alzar la voz, está moldeando un equipo con una identidad clara. Decisiones tácticas como devolver a Thouaméni al centro del campo cambiaron la dinámica del partido. De estar atascado en el primer tiempo, el Madrid pasó a someter a los italianos en el segundo. Y cayó el gol.
Un gol que llegó justo antes del regreso de Mbappé al campo. Fue Gonzalo quien le cedió su lugar. Pero antes, se encargó de marcar. Como si fuera un mensaje del destino: «Aquí estoy».
¡Qué gran cabezazo! ⚽️🔥 Gonzalo marca de cabeza tras una asistencia genial de Alexander-Arnold #MundialDeClubes2025 pic.twitter.com/RL9HAFKWVw
— Nayib MF (@NayibMF) July 1, 2025
Ahora el Real Madrid se instala entre los ocho mejores del torneo, con la moral en alza, la portería a cero por segundo partido consecutivo y un plantel donde las estrellas conviven con nuevas promesas. Vuelve al Bernabéu con una historia nueva: la de un joven que ya empieza a escribir su propio capítulo en la enciclopedia blanca.