Liverpool sobrevivió al asedio y castigó al PSG

Liverpool sobrevivió al asedio y castigó al PSG

La noche en el Parque de los Príncipes fue un espectáculo de asedio sin recompensa, de fútbol injusto en su esencia más cruel. El PSG de Luis Enrique bailó con el balón, dictó el ritmo del partido y acorraló al Liverpool hasta hacerlo parecer diminuto. Pero la historia ya ha demostrado que la posesión y las estadísticas no siempre ganan partidos.

Porque mientras los parisinos acumulaban 27 disparos y más de 700 pases, el Liverpool apostó a lo improbable: sobrevivir. Y sobrevivió.

La estrategia de Arne Slot era clara: salir vivo de París y definir la eliminatoria en Anfield. Pero el fútbol tenía otros planes. Cuando el reloj marcaba el minuto 87, Alisson, quien ya había salvado a su equipo en innumerables ocasiones, lanzó un balón largo. Darwin Núñez lo peleó con Marquinhos y, en el único momento de desconcierto de la defensa parisina, la pelota cayó en los pies de Harvey Elliott. Un disparo cruzado. Gol. Silencio en el estadio.

El PSG, que había creído merecer todo, se quedó sin nada. Volvió a revivir la pesadilla de los grandes escenarios, donde el peso de la historia le sigue jugando en contra. Alisson y Elliott no entienden de justicia, pero sí de efectividad. El Liverpool, con un solo disparo a puerta, hizo lo que el PSG no pudo con diez.

Ahora, los ‘reds’ llegan a Anfield con ventaja y un factor a su favor: en su casa, nunca caminan solos.