Alexander Isak necesitaba un partido así. Tras cinco encuentros de Premier sin ver puerta desde su llegada récord por 125 millones, el sueco firmó su primer gol liguero con el Liverpool y lideró un valioso 2-0 sobre West Ham en el London Stadium.
La victoria corta una racha capaz de tumbar a cualquier proyecto: tres derrotas consecutivas por tres goles o más y nueve caídas en los últimos doce partidos.
Un gol esperado… y necesario
Isak, que arrastraba un evidente déficit de ritmo por su pretemporada interrumpida, venía acumulando frustración. Erró un remate claro al inicio y Areola le sacó una chilena brillante. Pero al minuto 60 encontró el espacio, el control y la precisión para marcar tras asistencia de Cody Gakpo.
💣💥 ¡POR FIN!
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Se estrena Isak con el Liverpool en Premier… TRES MESES DESPUÉS.#PremierLeagueEnDAZN 🏴
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El sueco ya no anotaba en liga desde mayo, cuando aún vestía los colores del Newcastle.
Slot cambia piezas y obtiene respuesta
Arne Slot volvió a mandar a Mohamed Salah al banquillo —solo cinco goles esta temporada— y necesitaba un golpe de autoridad. Lo encontró. El equipo mostró mayor solidez y un plan más directo, aliviado por la chispa de Isak y la serenidad de Alisson.
West Ham, emoción y frustración
Antes del inicio, el estadio homenajeó a Billy Bonds, histórico capitán y entrenador ‘hammer’, fallecido a los 79 años. Su equipo inició con energía, pero se diluyó con el paso de los minutos.
La expulsión de Lucas Paquetá tras protestar de forma reiterada complicó cualquier reacción. Ya en el descuento, Gakpo selló el 0-2 tras un mal despeje local.
😓 SE ESTABA RIFANDO UNA TARJETA…
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Paquetá estaba pidiendo la tarjeta a gritos y, claro, acaba expulsado.#PremierLeagueenDAZN 🏴 pic.twitter.com/0VrxilZOtM
Un respiro, no una solución
Liverpool asciende al octavo puesto y frena su desplome. Pero el contexto es claro: goles escasos, confianza mínima y un vestuario que aún busca identidad. El tanto de Isak puede ser el punto de partida… o solo un paréntesis.
