Hace 20 años nació una leyenda.
Corría el minuto 88 en el Camp Nou, el marcador iba 1-0 frente al Albacete, y un chico delgado, con el dorsal 30 y rostro adolescente, recibió la última indicación desde el banquillo. Frank Rikjaard le dio paso a la joya de la Masia: un tal Lionel Messi. Nadie imaginaba que ese instante marcaría un antes y un después en la historia del FC Barcelona.
Apenas tres minutos después, Messi se anticipó a la eternidad. Tras una primera anotación anulada por fuera de juego, el argentino no se rindió. En la siguiente ronda, recibió un pase elevado de Ronaldinho, dejó botar el balón y lo picó suavemente sobre el arquero. El estadio estalló. El gol era válido. Y la imagen del brasileño cargándolo sobre la espalda se convirtió en profecía.
Today marks 20 years since Messi's first goal with Barça. The rest is history. 🐐 pic.twitter.com/W5Qhxz3mRC
— FC Barcelona (@FCBarcelona) May 1, 2025
Ese 1 de mayo de 2005 fue el principio de una obra maestra. Con apenas 17 años y 10 meses, el rosarino empezó a escribir su leyenda en el club que sería su casa por más de 16 temporadas.
Desde entonces, nada volvió a ser igual.
Messi transformó al Barça en una máquina de títulos y batió todos los récords imaginables: máximo goleador (672), más partidos jugados (778), más títulos ganados (35) y más victorias (542). Su palmarés incluye 4 Champions, 10 Ligas, 3 Mundiales de Clubes, 7 Copas del Rey y mucho más.
El Camp Nou fue testigo de su magia. El mundo del fútbol, de su dominio. Y ese primer gol, ese instante contra el Albacete, fue el disparo inicial del jugador que cambiaría el juego para siempre.
Hoy, dos décadas después, la pregunta es inevitable:
¿Volveremos a ver algo así?