El Mundial Sub-20 se pone serio

El Mundial Sub-20 se pone serio

Valparaíso ya no es la ciudad de la primera ronda: su aire tiene la urgencia de un estadio que entiende la gravedad. En un mismo día, dos historias se cruzan y exigen respuestas concretas: Ucrania vs España y Chile vs México. Estas no son simples fechas: son momentos del Mundial Sub-20 que decidirán quién respira y quién se queda fuera.

España llega con la mirada puesta en la redención. Su paso por la fase de grupos fue una curva de aprendizaje: caída ante Marruecos, empate con México, y luego la victoria que devolvió confianza frente a Brasil. El equipo de Paco Gallardo aparece como un bloque con una lectura táctica que, si se consolida, puede convertir la frustración de la fase inicial en un arma.

Frente a ellos, Ucrania entra con la serenidad propia del que no ha perdido: fue uno de los seis combinados que terminó invicto la fase de grupos y selló su pase con una victoria ajustada sobre Paraguay, factor que le inyecta convicción para esta eliminatoria. La vuelta de Hennadii Synchuk —que fue sancionado en el partido frente a Paraguay y ahora está disponible— añade un elemento de peligro ofensivo que España deberá controlar con disciplina.

Más tarde, el anfitrión se enfrenta a un examen de orgullo. Chile se clasificó por detalles (mejor puntuación en conducta frente a Egipto) y llega con el empuje del público y la dinámica creada por jugadores como Agustín Arce, quien ya brindó la asistencia para el primer gol en la fiesta contra Nueva Zelanda. Esa mezcla de presión y fervor local contrasta con la frialdad mexicana: un equipo invicto en la primera fase que aterriza en Valparaíso con objetivos claros y una amenaza definida en la punta de ataque.

Ese atacante es Gilberto Mora, autor de tres goles en la fase de grupos y uno de los nombres que han sobresalido en este torneo por su velocidad y capacidad de definición. Su presencia obliga a Chile a proponer soluciones tácticas distintas: no solo marcarlo, sino neutralizar los espacios que él explota. (Datos aportados por ti y confirmados en reporte de partido).

El punto de interés: en Valparaíso se enfrentan dos tipos de tensión: la del que llega a consolidar una progresión (España), la del que sostendrá una racha perfecta (Ucrania), la de un anfitrión que ganó por detalles y la de una selección que avanzó sin perder y con un goleador en racha (México). Cada partido puede definirse por un error defensivo, por la chispa de un extremo o por una jugada a balón parado. En ese margen mínimo se escribe el guion de la eliminación.