Una noche asiática, un festín de goles y un aviso claro para Europa.
Mientras la humedad de Seúl pesaba en el ambiente, el FC Barcelona salió al campo como si estuviera en una final. Era solo un amistoso, sí, pero nadie lo diría al ver la intensidad, el ritmo y, sobre todo, el vendaval ofensivo con el que los de Hansi Flick arrollaron al FC Seoul por 3-7 en un duelo que fue más un espectáculo cinematográfico que un simple partido de preparación.
Robert Lewandowski, el veterano goleador polaco, abrió la cortina en los primeros compases. Lamine Yamal, con apenas 18 años, se encargó de continuar con el show: desborde, gol al minuto 14 y una personalidad que parecía desafiar su edad. Pero el conjunto coreano, impulsado por su afición, no tardó en responder. Young-Wook Cho y Al-Arab igualaron el marcador con dos zarpazos que encendieron el estadio.
Seoul FC 3️⃣-7️⃣ FC Barcelona pic.twitter.com/GSQRP4dC4F
— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) July 31, 2025
El 2-2 antes del descanso dejaba todo abierto… pero Yamal no había dicho su última palabra. Al filo del entretiempo, el prodigio azulgrana volvió a aparecer para devolver la ventaja y desatar la locura culé.
En la segunda mitad, Andreas Christensen, normalmente silencioso, sorprendió con un misil desde larga distancia para el 2-4. Luego, Ferran Torres y Gavi sentenciaron la historia con dos golpes certeros en los minutos 74 y 76. Aunque Han-Min Jung recortó distancias para el FC Seoul, Ferran selló el 3-7 definitivo con una frialdad demoledora.
Según datos del club y medios como Mundo Deportivo e ESPN, el amistoso sirvió para ver a un Barça suelto, vertical y letal, con Hansi Flick enviando un mensaje claro: hay profundidad, hay talento, y la maquinaria ofensiva está afinándose justo a tiempo.
En un continente que siempre recibe al Barcelona con admiración, esta fue más que una visita: fue un recital.