El Barça cerró su gira por Asia con una exhibición demoledora (0-5) ante el Daegu FC, en un partido donde se mezclaron talento puro, jerarquía y juventud que desborda futuro. Fue el último capítulo de un viaje de tres actos —Kobe, Seoul y Daegu— que terminó como una sinfonía azulgrana.
El protagonista fue Lamine Yamal. No marcó, pero volvió a demostrar por qué ya no se le puede llamar «promesa». Desde la banda derecha, fue un torbellino de bicicletas, recortes y asistencias. A los 18 años, el chico de Rocafonda juega como si llegara una década en la élite. Según Mundo Deportivo, fue el mejor del partido. Y aunque no se notó, su impacto fue total.
Lewy no perdona, gran asistencia de GM pic.twitter.com/NyJVBqBY6H
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El primer golpe lo dio Gavi, ese jugador que juega cada minuto como si fuera el último. Llegando desde segunda línea, fusiló con la zurda para abrir el marcador. Poco después, Robert Lewandowski —que había perdonado antes— se reivindicó con el 0-2. Antes del descanso, otra vez Gavi firmó su doblete tras una asistencia quirúrgica de Koundé. Fue el 0-3 y la sentencia.
El segundo tiempo trajo nuevas historias. Marcus Rashford, recién llegado, se estrenó como goleador culé. Aprovechó un gran centro de Eric García y definió al primer toque, dejando atrás cualquier duda sobre su adaptación. El tanto fue el 0-5, pero también su primer capítulo como azulgrana. Justo antes, el canterano Toni Fernández ya había anotado el cuarto en una gran jugada colectiva.
El primer gol de Marcus Rashford 🔵🔴🦁 pic.twitter.com/8ktH6dfSPt
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La defensa, pese a algún susto inicial, no sufrió. Y jugadores como Dani Olmo y Bardghji siguieron sumando minutos e intensidad. Pero la gira, más allá de los resultados —1-3 al Vissel Kobe, 3-7 al Seoul y este 0-5 al Daegu—, deja una certeza: el Barça de Hansi Flick tiene clara su identidad. Presión alta, velocidad en los metros finales y un bloque joven con hambre de gloria.
Ahora, el equipo pone rumbo a casa para disputar el Trofeo Joan Gamper ante el Como y preparar su debut liguero. Pero Asia ya vio lo que se viene. Y la temporada aún no ha comenzado.
