En dos escenarios diferentes, con historias que parecían escritas por guionistas de cine, Flamengo y Bayern de Múnich firmaron su pase a los octavos de final del Mundial de Clubes 2025. No solo ganaron, remontaron. No solo avanzaron, lo hicieron con el peso de la historia sobre los hombros y ante rivales que no se rindieron fácilmente.
En Filadelfia, el Chelsea abrió el marcador ante Flamengo gracias a un gol de Pedro Neto. Todo apuntaba a una noche azul, pero el equipo brasileño, con el alma de Maracaná en el pecho, se negó a morir. Bruno Henrique, Danilo y Wallace Yan orquestaron una remontada que enloqueció a los miles de hincha rojinegros presentes. Flamengo, con seis puntos, ya está en octavos. Chelsea, con tres, se jugará la vida ante el Esperance, que aún sueña tras vencer al LAFC con un gol del argelino Youcef Belaili.
Horas después, en el Hard Rock Stadium de Miami, Boca Juniors también comenzó su propio drama. Harry Kane adelantó al Bayern de Múnich temprano, pero Miguel Merentiel encendió la esperanza xeneize con el empate al 66′. La ilusión duró hasta el minuto 89, cuando Michael Olise silenció a la hinchada argentina con un gol que sentenció el 2-1 y clasificó a los bávaros.
Boca, con tres puntos, necesita ahora una goleada casi milagrosa ante Auckland City. Pero incluso eso podría no bastar: un empate entre Bayern y Benfica lo deja fuera.
Flamengo y Bayern no solo ganaron. Resistieron. Respondieron a la presión, a la historia y a rivales dispuestos a cambiar el guión. Y hoy, son los primeros clasificados que mantienen intacto el sueño de alzar el trofeo más internacional de todos.
Flamengo y Bayern no solo ganaron. Resistieron. Respondieron a la presión, a la historia y a rivales dispuestos a cambiar el guión. Y hoy, son los primeros clasificados que mantienen intacto el sueño de alzar el trofeo más internacional de todos.